miércoles, 14 de julio de 2010

En contra de la tauromaquia

La tauromaquia es una práctica salvaje e injusta. Cada semana criaturas magníficas tienen que morir sólo para el entretenimiento de la gente. Debido a que es una parte de la cultura, puedo entender por qué el pueblo quiere conservarla. No obstante, si conserváramos todas las tradiciones de la cultura, seguiríamos viendo las batallas entre los pobres y los criminales en los coliseos de los romanos. Debido a que ya no debemos ser una sociedad tan bárbara, creo que es hora de que eliminemos todos modos de la pena injustificada. Por ello, no hay problema en matar los toros para comerlos, ya que es un uso de sus muertes para la continuidad de vida. No sólo es una cuestión del trato a los animales, sino del trato humano de todas las criaturas vivas, incluyendo los humanos mismos. Si soportamos estos espectáculos de sangre, estaremos soportando todas las formas de odio y tortura, como la guerra y la pena capital. Si cancelamos este ejercicio de crueldad, sin embargo, estaríamos emitiendo un mensaje a todo el mundo de que vivimos en una época de gran empatía y humanidad.

Fóto por EDUARDO BUXENS

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